En noviembre de 2023, las exportaciones mexicanas experimentaron un crecimiento del 2%, siendo este resultado impulsado principalmente por un aumento del 2.1% en las exportaciones no petroleras y contrarrestado por una disminución del 0.2% en las exportaciones petroleras. A lo largo de 2023, las exportaciones y las importaciones mostraron un comportamiento resiliente, pero los analistas señalan dificultades a partir del tercer trimestre. Aunque las exportaciones crecieron un 2.9% de enero a noviembre, se espera que la economía en su conjunto crezca entre un 3% y un 3.5% en 2023. En años anteriores, las exportaciones fueron el principal motor del crecimiento económico, superando el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2021 y 2022. Sin embargo, en 2023, las exportaciones ya no impulsan el crecimiento de manera destacada, y se anticipa una cierta desaceleración en comparación con el ritmo inicial del año. A pesar de las dificultades a corto plazo, se vislumbra un panorama alentador a mediano plazo debido al aumento de la capacidad instalada previsto con la relocalización (nearshoring). En noviembre, las exportaciones totales de mercancías disminuyeron un 1.62% mensualmente, influenciadas por caídas en las exportaciones no petroleras y petroleras. En cuanto a las importaciones, estas aumentaron un 3.1%, con incrementos notables en bienes de consumo y bienes de capital. A pesar de la situación actual, las exportaciones de productos manufacturados, como equipo profesional y científico, productos químicos y productos automotrices, registraron incrementos significativos. En resumen, aunque las exportaciones mexicanas siguen mostrando cierta resistencia, se anticipa una desaceleración en comparación con los años anteriores, y el desempeño económico está influenciado por factores globales y locales.
Fuente: El Economista
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